Lecciones aprendidas en los Miradores de la Anoia: Consejos para superar contratiempos y seguir adelante

Esta semana he estado grabando los Miradores de la Anoia, pronto podréis leerlo en el blog. De los tres miradores que he visitado, solo he logrado llegar a uno. Pero además, el primer día que fui me estresé mucho porque nada salió como había planeado. Así que allí, en medio del camino cortado y sin posibilidad de grabar la puesta de sol, solo pude regresar a casa con las manos vacías. O tal vez no.

Esta semana quería hablarles sobre los transportes terrestres. Si les interesa el tema, déjenme sus comentarios, porque pensé en escribirles otra cosa. Coloqué el soporte para GPS del coche en la ventanilla y compartí mi experiencia sobre lo que me había sucedido y cómo lo resolvería en futuras ocasiones:

1. Salir con tiempo:

Pensé que saliendo una hora antes de la puesta de sol tendría suficiente tiempo, pero no fue así. El tiempo se volvió en mi contra por dos razones principales: no tenía la mochila preparada y no sabía a dónde iba. Por lo tanto, aunque el GPS me indique que solo tardaré veinte minutos en llegar a mi destino, saldré media hora antes de lo previsto.

2. Preparar la mochila:

No se puede salir de casa en cinco minutos si no se tiene la mochila preparada ni siquiera sabes lo que vas a llevar. Bueno, técnicamente se puede, pero siempre se olvidará algo. Yo olvidé el móvil y me di cuenta de que la tarjeta de memoria no estaba vacía. Así que me aseguraré de preparar la mochila, cargar las cámaras y vaciar las tarjetas con antelación.

3. Saber qué queremos decir:

Quizás esto no sea tan importante en el blog, porque todo lo que quiero decir lo edito antes de publicarlo. Cuando voy allí, tomo fotos o tomo notas. Sin embargo, cuando grabo para un vídeo en el canal de YouTube, lo que digo es lo que se publicará. Así que es absurdo grabar si no se sabe qué se quiere decir.

4. Saber a dónde vamos:

Mi intención era grabar la aventura de descubrir los miradores por primera vez. Pero cuando se quiere llegar antes de la puesta de sol, eso juega en contra. Por eso, después de lo que pasó el miércoles, he ido a los miradores antes de grabar y, para mi desagradable sorpresa, solo he logrado llegar a uno de los tres. Pero seguiré intentándolo.

5. Último consejo:

Cuando te suceda algo así, pregúntate: ¿Quieres rendirte? Si, al igual que yo, respondes que no, que no quieres rendirte, pregúntate: ¿Qué puedo sacar provecho de esta situación? En mi caso, esta entrada en el blog es mi respuesta.

Espero que estos consejos les sean útiles, ya sea que les guste bloguear como a mí o en su vida diaria. Aunque las cosas no salgan como uno desea, no significa que las cosas vayan mal. Todo depende de ti.

Adriana